Michel Houellebecq descubrió los cuentos de Howard Phillips Lovecraft con dieciséis años y volvió a menudo a los grandes textos del maestro del terror cósmico. ¿Qué tenía Lovecraft como para provocar aquella fascinación en alguien aparentemente tan ajeno a los mitos de Cthulhu? La respuesta a esta pregunta guía un profético ensayo en el que la visión de Houellebecq sobre el oficio de la escritura ilumina tanto la obra del autor estadounidense como su propio trabajo.