Catorce casos clínicos reales de personas que la salud, a través de la fe en Dios y la confianza en sí mismos, demostrándonos que Dios hace de la enfermedad un camino privilegiado para encontrarse con él.
Levántate y anda lo escribí para los enfermos. Verán en estas escenas la acción multiforme de Dios y el variado pensar de los pacientes respecto a Dios en relación a su enfermedad: desde negarlo con obstinado ateísmo, hasta acogerse a él con la esperanza salvadora de la fe.