A medida que la utilización de la dermatoscopia se expande también se amplían sus aplicaciones, mucho más allá del diagnóstico diferencial de lesiones melanocíticas. El reconocimiento de patrones vasculares asociados a melanomas no pigmentados (amelanocíticos), la importancia de algoritmos diagnósticos, la revisión del análisis de los patrones y la técnica de Caos y Pistas, hacen énfasis en el hecho de que la dermatoscopia es una técnica diagnóstica en rápida evolución. Por lo tanto, para lograr especificidad y sensibilidad elevadas, el método requiere de conocimiento y habilidades prácticas