La escritura del poema sera siempre la de un recomienzo permanente, en su realidad verbal, las conjugaciones de todos los tiempos allí confluyen; por lo mismo el pasado remoto o el cercano -por no hablar de los recuerdos proféticosaflora en los pasajes de Aparece un instante, Nevermore con una resolución entrañablemente nítida y próxima.