"Rashad hoy también está ausente"
Eso reza el grafiti con el que empezó todo.
No, no exactamente, todo comenzó con una señora tropezándose con Rashad en una tienda y un paquete de patatas fritas cayéndose al suelo. Nada de lo que Rashad dijo después tuvo importancia. No impidió que la policía lo golpeara, una y otra vez, y otra vez con violencia contra el pavimento. Porque parecía que estaba robando, porque su piel era oscura, por sus ropas que eran holgadas; Porque tenía que estar robando.
Entonces Rashad comenzó a ausentarse por estar en un cuarto de hospital. Así empezó todo.