El texto arranca con don Juan y don Luis, en presencia del comendador, recapitulando cuál de los dos ha ganado una vieja apuesta amorosa. Don Luis no reconoce del todo su derrota y, llevado por la ira, acepta el reto que le lanza don Juan de conquistar a su prometida, doña Inés.
El Tenorio cumplirá su amenaza. Despechado, don Luis, en compañía del comendador, decide acudir al encuentro de don Juan, que da muerte a ambos para, a continuación, huir. Pasados cinco años regresa para descubrir que doña Inés ha muerto.