Las niñas de hoy en día viven en un mundo que las hace vulnerables. Preocupaciones como estar delgadas, vestir a la moda y gustar a los demás aparecen cada vez a una edad más temprana. Como consecuencia surgen ansiedades relativas a la autoestima y, por desgracia, los problemas en la alimentación y las autolesiones se han convertido en algo relativamente frecuente.