Es invierno, y en los valles de los pirineos españoles ha aparecido, al mismo tiempo que las primeras nevadas, un cadáver terriblemente desfigurado dentro de una de las iglesias románticas. Al igual que las inclemencias del tiempo, estos homicidios y sus horribles pormenores aumentarán. El comisario Jaume Fuster y su equipo buscarán al sospechoso principal tras descubrir las supersticiones medievales que han provocado estos crímenes.