Dentro del control de calidad, a veces, la información solicitada va más allá del conocimiento, incluso exhaustivo, de las sustancias y microorganismos que contiene una determinada muestra, o de sus propiedades fisicoquímicas, teniendo que llegar a niveles de precisar los esterotipos de dichos microorganismos o incluso establecer no sólo el origen de la especie sino incluso la procedencia geográfica del objeto de nuestro estudio, por motivos ecológicos o éticos, cuando de un alimento o material procedente de un ser vivo se trata.