La pandemia aún no ha acabado y los miles de muertos siguen pagando la obcecación del presidente; las promesas rotas han calado hondo entre la sociedad mexicana.
La pregunta es: ¿esa sociedad será capaz de tirar del poder al dictador, o, por el contrario, este mesías seguirá comprando, mintiendo, ocultando sus gazapos, traicionando al pueblo con el mismo cinismo de siempre? Y Martinillo, ¿cómo logrará salvarse de las aguas podridas que ha intentado purificar o al menos dar a conocer gracias a su columna, para no verse arrastrado en la desazón y en los silencios que comienzan a surgir alrededor de su relación de pareja y de su amante? ¿Qué salida encontrará para revertir ataques, cuidarse de amenazas y salir indemne para poder seguir alzando la voz?