Lucas es un niño que no sabe estarse quieto. Siempre se olvida de levantar la mano en clase y no sabe esperar su turno, le cuesta mucho seguir las normas.
En el recreo, los otros niños no lo quieren en su equipo porque no sabe seguir las reglas del juego, pero el problema es que no puede controlarse, porque padece el TDAH.
Este trastorno del comportamiento le hace actuar sin pensar, ser hiperactivo y no poder concentrarse fácilmente. Sus padres lo llevan al médico que le ayudará a tratar y controlar este trastorno de déficit de atención. A partir de entonces, para Lucas todo será mucho más fácil y divertido.
