Pinocho no es un muñeco de madera como los demás: tiene una vida propia y, aunque debería ir cada día a la escuela, siempre se distrae por el camino y acaba en los lugares más insospechados.
Su largo viaje lo lleva a un circo de marionetas, al País de los Juguetes e incluso al interior del vientre de una ballena. Diviértete haciendo los puzles que recrean las aventuras del travieso Pinocho, y luego coloréalos como más te guste. Pero antes de jugar, deberás ayudar a Pinocho a convertirse en un niño de verdad...